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Intoxicaciones domésticas

Intoxicaciones

Las intoxicaciones en mascotas ocurren en muchos casos por falta de información del propietario y por eso, con este artículo, queremos poner en relieve las más habituales. Como toda sustancia tóxica, depende de la cantidad pero las que os presentamos hoy pueden ser fatales a dosis relativamente bajas.

Cuando un animal entra en casa hay que tener cuidado con las cosas a las que tiene acceso. Los animales de compañía tienen gustos diferentes a los nuestros y se pueden sentir atraídos por algo que a nosotros no se nos pasaría por la cabeza. Los perros especialmente, prueban muchas cosas con la boca sin mucho criterio y, si les gusta, no paran hasta acabárselo. Los gatos son más desconfiados es este aspecto, aunque también sienten debilidad por algunas cosas contraproducentes para su salud.

Los síntomas de una intoxicación dependen del tóxico y de su acción dentro del organismo. Lo más frecuente al principio son problemas gastrointestinales (salivación, vómitos o diarreas) y abatimiento. Los riñones y el hígado son de los órganos más afectados ya que su función dentro del organismo es la depuración y eliminación de deshechos, y los tóxicos se pueden concentrar en cantidades peligrosas dentro de estos órganos, produciendo su fallo agudo. Los síntomas nerviosos, tales como descoordinación, parálisis o convulsiones, y los síntomas cardíacos como las arritmias pueden comprometer seriamente su salud de forma inmediata.

Lo más importante en caso de intoxicación es acudir a un centro veterinario y aportar la máxima información del tóxico para administrar los medicamentos adecuados. Inducir el vómito es la primera reacción que tenemos, pero en el caso de que sea un producto corrosivo es contraproducente. En ocasiones, los síntomas se pueden mostrar días después de la ingesta y por eso debemos estar atentos a detalles como encontrar algún producto de limpieza derramado o el cubo de la basura abierta.

Alimentos humanos: chocolate, cebolla, ajo

El chocolate contiene teobromina (sobretodo el chocolate negro) que no metabolizan rápidamente y sobreestimula el sistema nervioso, altera el ritmo cardíaco y respiratorio.
La cebolla y el ajo provocan anemia y problemas respiratorios, aparte de síntomas gastrointestinales.

Productos de limpieza: limpiadores, detergentes, naftalina

Desafortunadamente estos productos les resultan apetecibles pero son muy irritantes para el tracto digestivo y respiratorio. Producen signos gastrointestinales graves.

Medicinas humanas: paracetamol, ibuprofeno, aspirina

A menudo creemos que las medicinas que nos ayudan a nosotros, también les pueden beneficiar a ellos. ¡Pero nada más lejos de la realidad! Su metabolismo es diferente y medicamentos como el paracetamol o el ibuprofeno dañan seriamente al hígado.

Productos de jardinería: rodenticidas, insecticidas, herbicidas

Existen una gran variedad de productos contra plagas que causan desde vómitos y diarreas a problemas nerviosos graves.
Los rodenticidas producen problemas de coagulación días y semanas más tarde de su ingestión. Se producen hemorragias que su organismo no puede parar.

Plantas ornamentales

Las plantas ornamentales son una debilidad de los gatos y de algunos perros exploradores. La planta de navidad (poinsetia) es una intoxicación habitual en gatos; debemos impedir su acceso a ella. Produce problemas intestinales y neurológicos que pueden ser mortales.
Otras plantas tóxicas son el tomate, la espinaca, la azalea, el azafrán de otoño, el aguacate (hojas), la adelfa, la actea, la dulcamara, la belladona, la dedalera, la cicuta, la cicuta acuática, el tejo, el ricino y el lirio de los valles.

Líquido anticongelante, pinturas, barnices

A los perros les gusta mucho el líquido anticongelante pero por desgracia puede resultar fatal porque daña seriamente los riñones.
Las pinturas y barnices son raramente ingeridos, pero si una mascota respira pintura o barniz puede desarrollar problemas respiratorios. Debemos evitar su exposición, ventilar bien antes de reintroducir a nuestro animal de compañía y limpiar su cama, juguetes y comederos que puedan contener partículas.

La información y la prevención puede evitar estos accidentes. Guarda bien los productos peligrosos y evita que tenga acceso a ellos. ¡Asegúrate de que tu hogar es a prueba de mascotas!

En nuestra Clínica Veterinaria Joan Miró, si su animal accede a este tipo de tóxicos, podremos ayudarle.

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